Liturgia viva

El calendario litúrgico anual

Lo viejo y lo nuevo

Description

 Lunes 20 de Enero, 2025

 

Segunda Semana Ordinario

 

LO VIEJO y LO NUEVO

 

Oración Colecta

Oh Dios, inmutable pero siempre nuevo:

Tú quieres que seamos

tu pueblo peregrino en marcha

en pos de Jesús, tu Hijo,

hacia un nuevo futuro de justicia y amor.

No permitas que nos quedemos como anestesiados,

contentos y satisfechos con nuestros viejos hábitos

y con nuestros modos rutinarios y haraganes.

Ayúdanos a aceptar el dolor

de tener que dejar atrás lo familiar y conocido

y ábrenos al reto del Evangelio,

para llegar a ser más semejantes a tu Hijo,

Jesucristo nuestro Señor,

que va guiando nuestros pasos vacilantes.

 

Primera Lectura: Hebreos 5,1-10 Siendo Hijo, aprendió a obedecer

Los sacerdotes judíos tenían que ofrecer sacrificios por sus propios pecados. Pero el día que Dios manifestó a su Hijo como sumo sacerdote entre los hombres, Cristo, en obediencia a la voluntad del Padre, se entregó a sí mismo asumiendo sobre sí todo nuestro pecado para nuestra Salvación.

Hermanos: Todo sumo sacerdote es un hombre escogido entre los hombres y está constituido para intervenir en favor de ellos ante Dios, para ofrecer dones y sacrificios por los pecados. Él puede comprender a los ignorantes y extraviados, ya que él mismo está envuelto en debilidades. Por eso, así como debe ofrecer sacrificios por los pecados del pueblo, debe ofrecerlos también por los suyos propios.

Nadie puede apropiarse ese honor, sino sólo aquel que es llamado por Dios, como lo fue Aarón. De igual manera, Cristo no se confirió a sí mismo la dignidad de sumo sacerdote; se la otorgó quien le había dicho: Tú eres mi Hijo, yo te he engendrado hoy. O como dice otro pasaje de la Escritura: Tú eres sacerdote eterno, como Melquisedec.

Precisamente por eso, durante su vida mortal, ofreció oraciones y súplicas, con fuertes voces y lágrimas, a aquel que podía librarlo de la muerte, y fue escuchado por su piedad. A pesar de que era el Hijo, aprendió a obedecer padeciendo, y llegado a su perfección, se convirtió en la causa de la salvación eterna para todos los que lo obedecen y fue proclamado por Dios sumo sacerdote, como Melquisedec.
 

Salmo Responsorial

Salmo 109, 1.2. 3. 4

R. (4bc) Tú eres sacerdote para siempre.
Esto ha dicho el Señor a mi Señor:
“Siéntate a mi derecha;
yo haré de tus contrarios el estrado
donde pongas los pies”. 
R. Tú eres sacerdote para siempre.
Extenderá el Señor desde Sión
tu cetro poderoso
y tú dominarás al enemigo. 
R. Tú eres sacerdote para siempre.
Es tuyo el señorío; 
el día en que naciste, 
en los montes sagrados, 
te consagró el Señor antes del alba. 
R. Tú eres sacerdote para siempre.
Juró el Señor y no ha de retractarse:
“Tú eres sacerdote para siempre,
como Melquisedec”. 
R. Tú eres sacerdote para siempre.

 

Aclamación antes del Evangelio

Hebreos 4,12

R. Aleluya, aleluya.
La palabra de Dios es viva y eficaz
y descubre los pensamientos e intenciones del corazón.
R. Aleluya.

 

Evangelio: Marcos 2,18-22  El novio está con ellos; ¿cómo van a ayunar?

Marcos anuncia que el tiempo de la espera ha terminado. Que la Promesa se ha cumplido en Jesucristo. Dios no nos ha dejado a nuestra suerte. Pero este nuevo tiempo, tiempo de cambio, supone algún problema para nosotros. La dificultad está en que lo viejo y lo nuevo se muestran normalmente intolerantes el uno con el otro. Jesús es categórico: a vino nuevo, odres nuevos. Abandonar viejos hábitos, antiguas seguridades… La única certeza es la conversión. Y que Dios, en Jesús, inaugura el tiempo nuevo: ya está con nosotros…

En una ocasión en que los discípulos de Juan el Bautista y los fariseos ayunaban, algunos de ellos se acercaron a Jesús y le preguntaron: “¿Por qué los discípulos de Juan y los discípulos de los fariseos ayunan, y los tuyos no?”

Jesús les contestó: “¿Cómo van a ayunar los invitados a una boda, mientras el esposo está con ellos? Mientras está con ellos el esposo, no pueden ayunar. Pero llegará el día en que el esposo les será quitado y entonces sí ayunarán.

Nadie le pone un parche de tela nueva a un vestido viejo, porque el remiendo encoge y rompe la tela vieja y se hace peor la rotura. Nadie echa vino nuevo en odres viejos, porque el vino rompe los odres, se perdería el vino y se echarían a perder los odres. A vino nuevo, odres nuevos”.

 

Oración de los Fieles

  • Por la Iglesia, para que tanto el pueblo de Dios como sus líderes sigan los impulsos del Espíritu creador para comunicar a la gente de hoy, en un lenguaje moderno, el mensaje siempre nuevo del Evangelio de Jesucristo, roguemos al Señor.
  • Por los artistas, poetas e inventores. Para que nos revelen el esplendor de la Creación y las riquezas de la vida más allá de la aparente rutina y monotonía de nuestra existencia, roguemos al Señor.
  • Por nuestras comunidades cristianas. Para que no tengamos miedo al cambio auténtico, y consigamos de Cristo el valor para comenzar –con nuestra propia conversión– la renovación del mundo y de la Iglesia, roguemos al Señor.

 

Oración sobre las Ofrendas

Señor Dios nuestro:

Con este pan y este vino que ahora te ofrecemos

celebramos la alianza que tú renuevas con nosotros

por la sangre de Jesucristo.

Haznos de verdad tu nuevo pueblo fiel

vinculado a ti en una unión eterna de amor.

Renueva nuestros corazones;

transfórmanos en tu nuevo vino

de esperanza y alegría,

para que podamos reconstruir esta nuestra tierra de hoy

Y caminar hacia adelante con tu Hijo Jesucristo

hacia unos nuevos cielos, donde tú serás nuestro Dios,

por los siglos de los siglos.

 

Oración después de la Comunión

Oh Dios de esperanza:

Tú nos has dado a Jesús tu Hijo

como compañero de camino

para ayudarnos a entender

las cosas viejas y familiares

con un corazón nuevo y joven,

y para renovarnos a nosotros mismos

y así transformar el mundo.

Que él nos siga estimulando

cuando tratamos de transigir y no cambiar,

simplemente metiendo remiendos a lo viejo, aquí y allá,

Que él también refrene nuestra impaciencia

cuando intentamos acelerar a la gente

más allá de su capacidad de cambio y crecimiento.

Llévanos siempre hacia adelante

por medio de nuestro guía

en quien plenamente confiamos,

Jesucristo nuestro Señor.

 

Bendición

Hermanos: Sí, no es fácil realizar cambios, ni para nosotros, ni para la Iglesia ni para el mundo. Pero la vida es crecimiento. Tenemos que ir creciendo hasta la talla y estatura de Cristo. Tenemos que llegar a ser cristianos maduros en comunidades también maduras, con la bendición del Señor. Que la bendición de Dios todopoderoso, Padre, Hijo y Espíritu Santo, descienda sobre ustedes y los acompañe siempre.

Las palabras de Jesús dirigidas a los fariseos probablemente generarían nuestra simpatía: es simplemente imposible ayunar en una boda. Las bodas latinoamericanas son en su mayoría fiestas con comida abundante donde se rompen las dietas. Para quien organiza y participa de la fiesta sería impensable, inclusive ofensivo, no comer y alegrarse en un momento tan importante. La enseñanza sobre el ayuno nos recuerda el no añadir más fatigas y dolor a la vida en un continente donde, según la FAO, cerca de 42.5 millones de personas sufren de hambre y sub-alimentación. Jesús nos llama a comer y alegrarnos mientras el novio está con nosotros, cuando la posibilidad permite la celebración y la alegría. Ya llegará el momento en que las circunstancias de nuestra existencia nos lleven al ayuno obligado.

¿Cómo comprender el ayuno hoy? En América Latina vivimos bajo ayuno forzado, mientras Jesús usó el banquete de bodas como metáfora del Reino. ¿Y si ayunamos de egoísmo, injusticia e individualidad? Mientras tanto, pongamos la mesa para celebrar el banquete de Dios.

BibleClaret

Hong Kong

Síguenos

Copyright © Bibleclaret 2025. All Rights Reserved.